sábado, 25 de agosto de 2007

Dicen que la familia no se escoje. Dicen que es sólo el punto de comienzo para empezar a encontrar tu propia tribu. Están contigo, luchan contigo y mueren contigo. Es difícil encontrar quien te sepa amar, y más aun lo es el saber mantenerlos. También escuché alguna vez por ahí a alguien que dijo: "querer es sufrir". No me cuesta imaginar qué habrá estado pensando esa persona al momento de decir eso, pero también es cierto que quién no se arriesga no cruza el río. Cómo saber si sufriremos más al estar solos por no querer arriesgarnos a amar que después de haber amado sufrir como nunca creímos que podríamos hacerlo.
Sé que mis palabras suenan tortuosas, y no me gusta. Conozco personas que se regocijan en su dolor, y mientras más se húnden en él, más de su persona sacan a la luz. ¿Es muy grave ser una persona atormentada? Una amiga muy querida, de esas que son miembros de la tribu que instituyes a lo largo de tu vida, me dijo que sufría. Me dijo que no era nadie sin su sufrimiento y que si borrara esa parte de su vida, al mirar atrás probablemente no encontraría nada más. No supe que decir. Sentí que iva a la base de mi ser y mi escencia. Me quedé sin palabras. No me gusta no tener nada que decir, después de todo, es lo único que se hacer.
He tratado de decir algo sin ser pesimista, y hé aquí el resultado, un montón de palabras sin sentido que no llevan a ninguna parte.
Dicen que la soledad es la peor enemiga de una mente enferma. Yo siento la soledad, estoy viviendo con ella. Mi mente, tal vez enferma, tal vez no, de vez en vez saca provecho a la soledad. A veces, mi mente colapsa y creo que mi cuerpo está por reventar, otras veces mi espíritu está por quebrarse. Es ahí cuando llego a esta instancia, a tomar un lápiz y un cuaderno que me permiten vaciar mi mente. Hay momentos en los que creo que se me va a caer el mundo encima, pero cuando lo pongo todo en el papel, todo parece perder cualquier sentido, gravedad o significado.
Son sólo ideas, soy sólo yo.

1 comentario:

algunas cosillas dijo...

tan idem.... no se qué decir... y tampoco me gusta callar.

no queda otra que adornar de bonitas palabras la mierda que queremos sacar. A veces. Hay veces que es mejor reírse de uno mismo. resulta más dif´´icil pero menos tedioso.
bueno, no quito protagonismo en tu blog. Es taaaan tuyo!
te quiero muchisimo gorda! sos un sol!
chauu chauu