lunes, 27 de agosto de 2007

Una vez más...

Hoy he vuelto a despertar sin metas, creo haberlas dejado olvidadas en alguna cuneta. O tal vez huyeron de mí mientras deje la puerta abierta para mirar si alguna hora desierta destruye los vestigios de una vida incierta.


No sé por qué el agua me inspira. Hoy, como si el mal de ella viniera, limpié mi piel con vehemencia, creyendo que el dolor y la insensatez estaban en ella y que si la raspaba lo suficiente se iría junto con el agua, pero no fué así.


Sólo obtuve una piel seca y arrugada, y montón de versos que vinieron y se fueron junto al agua. Mañana tal vez alguien me pregunte que hise hoy, y yo le responderé "sufrí", y luego reiré. Tal vez algún día por eso gane un premio Nobel, a la paz, no lo sé, por divagar, tal vez.


Después no supe qué escribir, y tuve que volver al baño por si las ideas volvían a fluír. Mi cabello sigue mojado, y me hace pensar, así tal vez me enfermo, y con suerte podría morir, pero después me veo a mi misma y digo, ¿como diablos podría volver a escribir?
Hace un rato, cuando el agua corría por mis gordos brazos, tenía tanto que decir y sin mentir. Ahora se han escapado de mí, llevándose quizá algunos sueños ocultos trás de sí.

1 comentario:

algunas cosillas dijo...

no se si hoy andaré más optimista o que. Pero creo que a veces es mejor que las cosas se vayan así de rápido, como el agua. Otras que vale la pena conservar y de las cuales cuesta tanto desprenderse... ojalá la rabia y las frustraciones se fueran así de rápido... que con un solo lavado las desprendiéramos de nosotros. Y saliéramos limpias y renovadas con sólo una ducha.
Ojalá la mente fuera así de clara y cristalina. Simplemente...como el agua.